Cansados de tanta gente en Cuenca en Semana Santa, un pequeño grupo (Picha, Negro, Guillermo, Jaime y Pepa) decidimos ir en Turbas al campo, hicimos noche en la Fuente del Peral (refugio de Poyatos), para al día siguiente hacer el cañon.
El viernes nos levantamos pronto todos para ir hacer el cañon, pero entre unas cosas y otras al final no nos metimos hasta las 5 de la tarde, cuando el sol ya no calentaba tanto, lo que se hubiera agradecido ya que el agua estaba bastante fresquita, y mas después de la nochecita que hizo que nos dieron varios bajo cero en el refugio.
Al día siguiente (sábado) fuimos a buscar la entrada de el Sumidero del Labio de la Tía Coja (que estaba justo en dirección contraria a las indicaciones que el presidente nos dio), al final la encontramos gracias a un GPS que uno de los de Albacete llevaba, esa misma tarde nos bajamos casi todos a Cuenca, a excepción del Picha y el Negro que hicieron noche.
A la mañana siguiente, con todo el suelo blanco después de la nieve que cayó (2 dedos), Pichón y Negro, hiceron el Sumidero del Labio de la Tía Coja, de donde salieron empapados , helados, llenos de mierda, pero muy contentos.
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