Este es el relato de nuestro viaje al Valle del Tena.
En un primer lugar, el día 24, fue una avanzadilla con cuatro miembros del club, Toño, Zapata, Sergio y Keny, que tras madrugar lo justo y bajar a alquilar el material que les faltaba se encaminaron hacía las cumbres cercanas a Panticosa. Dadas las horas en la cuáles comenzaron su camino su avanace se hizo penoso undiéndose continuamente en la nieve, llegando incluso en algunas ocasiones ha introducirse hasta la cadera.
Al día siguiente y partiendo de Cuenca a las 15:00 horas el segundo grupo,Recuenco, diana, Quin y Gonzalo, nos dirigimos al encuentro del resto de componentes del club, los cuáles se encontraban a nuestra llegada descansando plácidamente en el refugio conocido como Casa de Piedra. A la hora de cenar y durante una pequeña reunión se van limando las asperezas hasta concretar, de manera un poco abstracta, la actividad del día siguiente y todo el grupo se dirige a descansar.
Preparando el material junto a la roca
A las 7:30 comenzamos a levantarnos para organizar todo y despues de desayunar comenzamos el día dirigiendonos al sendero posterior del refugio (GR11). Tras unas dos horas de ligera ascensión nos dirigimos hacía una pendiente algo pronunciada para una vez dentro de ella dividir el grupo en dos partes. Por un lado y formando cordada de escalada se encontraban:Quin, Keny, Diana y Recuen´los cuáles comenzaron ascendiendo por una grieta introduciendo en las fisuras empotradores y friends. Por otro lado, Gonzalo, Zapata, Toño y Sergio ascendimos por un pequeña canal introduciendo seguros en rocas y árboles. Tras terminar todos nos reunimos de nuevo y procedimos a comenzar la marcha de regreso hací el refugio donde cenamos y descansamos plácidamente.
Recuen,el último de la cordada, en la reunión intermedia
Toño y Zapata de regreso
El domingo 27 de Enero el grupo que llegó en primer lugar al refugio, incluyendo a Diana, realizó una pequeña escalada y regresó hacia Cuenca; excepto la única Chica del viaje que se quedó descansando en el refugio. Antes a, a las 7:30 de la mañana Recuen,Quinito y Gonzalo noas habíamos levantado para iniciar nuestra ascensión camino del Garmo Negro. Como buenos machos pteropus que somosy pese a la gran cantidad de gente practicando esquí de montaña nunca preguntamos para asegurarnos de nuestra dirección por lo que terminaos en un collado al lado del Argualas donde procedimos a su ascensión. Una vez encordados y metiendo friends en las grietas fuimos subiendo los tres componentes de la cordada. Una vez estabamos en una arista nos dimos cuenta de que eran las 3 de la tarde y sopesamos si seguir o bajar por el mismo sitio. Al final nos subimos sobre un pequeño pico que se encontraba al lado y tras descansar un poco y admirar el paisaje procedimos a realizar el camino de vuelta. Al llegar al refugio ya no quedaba casi nadie y encontramos a Diana durmiendo la siesta plácidamente.
Quinito y Recuen en el pico
El lunes y tras haber cenado el día anterior con Fernando(el 5 estrellas o mejor dicho*****) fuimos a Formigal para esquiar y relajarnos un poco. Como siempre y como buenos machos pteropus el aprendizaje fue de manera autodidacta con los golpes que conlleva. Pese a ello pasamos un buen día comenzando el regreso a Cuenca en torno a las 17:00 horas.
Y na da más aqui os he dejado la crónica y a ver si un fin de semana nos escapamos a Gredos que no s pilla más cerca.
Tras una noche apacible despertamos, sin mucho madrugar,en torno a las 9:30 y poco a poco fuimos desayunando y preparando las biciletas para la ruta del día. El resto se bajrían por compromisos familiares y demás historias.
Al final de los cuarenta kilómetros los trellegamos bastante tocaos pero la verdad es que mereció la pena.
